Coatzacoalcos, Ver.- “Hoy solo tenía 20 pesos para darle de comer a mis dos nietos, que se convirtieron en mis hijos. Alexander tienen 9 años y Helem cumplió 4, desde que murió su mamá es difícil sacarlos adelante”, se lamenta América del Carmen Gómez.
América es madre de Xóchitl Nayeli, una de las 30 víctimas que fallecieron en el atentado del bar Caballo Blanco, en Coatzacoalcos, ocurrido el 27 de agosto de 2019. La mujer es una de las 23 víctimas indirectas que reciben del gobierno federal una ayuda de mil pesos mensuales por concepto de alimentación.
través de la solicitud de información 0063800003420, E-Consulta Veracruz documentó que, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), apenas destinó 9 mil 869 pesos a cada una de 23 víctimas indirectas entre enero y octubre de 2020. Además, 10 mil 500 pesos por concepto de alojamiento, sin precisar cómo se dividió el monto.
El atentado en el bar Caballo Blanco dejó a 30 personas huérfanas. Sobre la asistencia a estas personas la CEAV no informó a detalle, bajo el argumentó de que los nombres de los beneficiados son confidenciales.
Sin detenidos y sin apoyos, sobreviven los familiares de las víctimas
Este 27 de octubre se cumplen 14 meses de la peor masacre registrada en la historia de Coatzacoalcos, en la que murieron calcinados bailarinas, trabajadores y clientes del bar.