Por los efectos de la pandemia este año bajó drasticamente la producción de flor de cempasúchil en San José Paxtepec, Coacoatzintla, y la región.
Lugareños señalan que en los últimos años la competencia de venta es mayor dado a la importación de la flor poblana, teniendo que reducir los costos del producto. Hoy, las condiciones sanitarias complicaron más el mercado.
En ese sentido, don Juan Pérez Hernández comenta que para estas fechas, en otras ocasiones, su florya estaba “apalabrada o vendida” y, al menos, recibía cinco propuestas de compra.
Sin embargo, este 2020, toda vez que se prevé el cierre de panteones para evitar aglomeraciones de personas además de la ausencia de estudiantes en las escuelas ante la pandemia del COVID19, “la crisis de venta es mayor que en los últimos años”.
Incluso, recordó que, en esta ocasión la siembra -que se inició a principios de julio- fue menor, “estaba muy fuerte lo de la enfermedad (coronavirus) y nadie quería salir de la casa, ni al campo, por eso este año hay menos flor, pero su precio no sube, al contrario, baja, porque no hay compradores”.
En tanto refirió que, “esto es más por tradición porque negocio no es (…), muchos este año no sembraron, no se le gana. Yo creo que hubo menos siembra por miedo a la enfermedad del COVID”.
Dijo que él y su familia decidieron mantener su producción misma que no rebasa la media hectárea por lo que de venderla completa “solo se obtendría lo invertido, sin tener una ganancia real”.
“Ya que este año será muy diferente, porque no habrá altares en las escuelas como años anteriores y en muchos panteones se está anunciado el cierre temporal en los días mayores de esta celebración; la venta no será buena, además de todo lo que traen del estado de Puebla”.
Del promedio de su terreno espera obtener 200 rollos grandes para comercializarlo de manera directa en las colonias de Xalapa o, en el mejor de los casos, “a un solo comprador que se encargue de la reventa”.