Ambos equipos buscaron la portería rival con dinamismo, protagonizando numerosas llegadas al área.
Puado, muy activo, dispuso de las dos primeras opciones de marcar. Primero con un disparo alto tras resbalón de Magallán y, posteriormente, con un remate que tras tocar en el central argentino despejó con reflejos Edgar Badía.
La réplica del Elche llegó a balón parado. Mascarell, completamente solo, remató al cuerpo del debutante Pacheco e, instantes después, fue Ponce el que no encontró portería con otro remate de cabeza desde el interior del área pequeña.
En pleno carnaval ofensivo, el Espanyol tuvo una doble oportunidad de oro para abrir el partido. Braithwaite rompió a la defensa pero no logró superar a Badía, cuyo rechace cayó en los pies de Denis Suárez, pero el remate del catalán fue despejado sobre la línea por Roco.
Ni siquiera la interrupción del juego durante varios minutos, provocada por un choque entre Oliván y Ponce, puso freno al partido.
Gumbau, con un disparo desviado, y Ponce, que cruzó demasiado el balón ante Pacheco, disfrutaron de nuevas opciones de marcar ante un Espanyol punzante en ataque, pero frágil en defensa.
El conjunto catalán volvió a la carga con una acción que acabó en gol de Puado, pero anulado por el colegiado por fuera de juego previo de Darder.
Palacios y Ponce cerraron con dos nuevos disparos a puerta una primera parte intensa y dinámica a la que solo le faltó el gol.
El paso por los vestuarios no frenó el ímpetu ofensivo del Elche, que llevó la iniciativa del juego de una forma más controlada, ni del Espanyol, que no renunció nunca al contraataque.