En Veracruz, varias familias han encontrado refugio debajo del puente Allende debido a la crisis habitacional y la falta de apoyo social. Esta situación refleja las dificultades que enfrentan muchas personas en la región, quienes han perdido sus hogares y se ven obligadas a buscar un lugar seguro para vivir.
Los vecinos han señalado la precariedad de las condiciones en las que viven, enfrentando desafíos como la falta de acceso a servicios básicos, seguridad y la exposición a las inclemencias del tiempo. Organizaciones locales y ciudadanos solidarios han comenzado a organizar donaciones de alimentos y ropa, así como brindar apoyo emocional a estas familias.
La situación subraya la necesidad urgente de políticas públicas que aborden la problemática de la vivienda en Veracruz y que ofrezcan alternativas dignas y sostenibles para quienes se encuentran en esta situación vulnerable. La comunidad espera que las autoridades tomen medidas efectivas para mejorar las condiciones de vida y proporcionar un hogar seguro para todos.