La Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) exigió a la Secretaría de Educación Pública (SEP) garantizar las condiciones para que los estudiantes regresen a clases presenciales en enero.
El representante de la organización, Leonardo Gacía, señaló que el gobierno debe dar garantías para que no haya un contagio masivo tanto para los alumnos como para los tutores, además de evitar un rebrote en las aulas.
«Que no va a haber riesgo de infección para el menor o para quien lo traslade a la escuela, aunque esté en semáforo verde, y que no va haber un riesgo de rebrote dentro de las instalaciones».
Además, «curiosamente» los tres estados en color verde en el semáforo epidemiológico, son quienes tienen más escuelas rurales que no tienen luz, agua potable y dificultades para cumplir con las medidas como el uso cubrebocas, aplicación del gel antibacterial y medición de la temperatura.
«Sin embargo, algún día tendremos que regresar a la actividad presencial; nosotros le hemos pedido a la Secretaría de Educación que antes de dar el banderazo de regreso haya una mesa de diálogo con padres de familia, con maestros, con líderes sociales para construir juntos la mejor forma del regreso».
De lo contrario, la situación podría salirse de control. Y aunque es difícil fijar reglas generales para todos porque cada escuela es diferente, pero es necesario contar con adecuaciones para que cada una la vaya tomando de forma gradual.