Andrés Luévano, de 24 años de edad, venció al cáncer en dos ocasiones, y afirmaba que quería vivir intensamente cada minuto de su vida, pero murió atropellado por “un borracho”, denunció su familia en la ciudad de Aguascalientes.
Rocío Pinedo, la madre de Andrés, exige justicia y denuncia que el pasado 16 de enero un automovilista “borracho” se pasó un alto y acabó con su vida, lamentablemente después de que venciera a la muerte después de que le detectaron cáncer, a los 16 años de edad.
Informó que su hijo recibió 68 quimioterapias de seis horas cada una, Después de una operación a corazón abierto lograron retirarle el resto del tumor y después de 8 meses de sesiones quedó en recesión; había vencido al cáncer pero luego de fracturarse jugando un brazo, le detectaron un nuevo tumor que también pudo superar, gracias a su actitud de lucha y a un injerto de hueso de cadáver.
El 16 de enero un conductor, en presunto estado de ebriedad, se pasó la luz roja del semáforo impactando el Uber en el que Andrés regresaba a su domicilio luego de visitar en su casa a un amigo suyo, muriendo al instante en el lugar del incidente; su familia lo buscó varias horas en hospitales y en la fiscalía de Aguascaliantes en donde les confirmaron su fallecimiento.
Andrés decidió tatuarse un ave fénix, porque decía que había resurgido de entre las cenizas; se logró graduar de ingeniería arquitectónica y trabajaba; disfrutaba su vida con responsabilidad.
El conductor que impactó el Uber en donde viajaba Andrés se dio a la fuga, de acuerdo con videos del hecho captado por cámaras de seguridad, lejos de ayudar, junto con su acompañante, una mujer.